Dar Voz: Por nuestra salud y el bien de nuestras familias: Todos a luchar contra el cáncer*
*Por Senador Daniel Ávila Ruiz
El pasado 4 de febrero, como cada año, se conmemoró el Día Mundial contra el Cáncer. Con ello en mente, investigadores delInstituto Belisario Domínguez (IBD) elaboraron un documento que sintetiza cifras y acciones contra este mal.
Según los datos citados por el IBD, la Organización Mundial de la Salud (OMS) cuenta con un registro de más de cien tipos de cáncer, y cualquier parte del cuerpo puede ser afectada por él. Los principales factores de riesgo tienen que ver con el estilo de vida sedentario, la falta de ejercicio, poco consumo de frutas y vegetales, consumo excesivo de alcohol, fumar y tener varias parejas sexuales.
Los tipos más comunes de cáncer entre los hombres son de hígado, pulmón, estómago, colon/recto y esófago. Entre las mujeres los de mayor prevalencia son de mama, pulmón, estómago, colon/recto y cuello del útero.
Según la Organización Mundial de la Salud, en 2012 se registraron más de 14 millones de nuevos casos de cáncer en el mundo, y la proyección es que alcancen cerca de 22 millones anuales durante las próximas décadas.
En México el cáncer es la tercera causa de muerte. Se detectan alrededor de 148 mil nuevos casos por año, y 53% de ellos fallece. Las mujeres muestran porcentajes más altos de cáncer que los hombres: 55.7% y 44.3% respectivamente.
El cáncer entre nuestra población infantil y juvenil debe ser foco de atención. Y es que entre niños de 5 a 14 años el cáncer es la segunda causa más común de muerte. Alarma que de acuerdo con la Secretaría de Salud, 15% de los niños con cáncer nunca reciben tratamiento especializado.
Con todo, según reportes de la Organización Mundial de la Salud, nuestro país ha avanzado en la administración de vacunas contra virus promotores del cáncer. Los niños reciben la inmunización contra papiloma a los 9 y a los 11 años; la vacuna contra hepatitis B al nacer, a los 2 meses y a los 6 meses, y que 82% de los infantes cuentan con dicha protección.
Sobre pruebas de detección, en México existen las de atención cérvico uterina, exploración de mama y mamografía, y tacto rectal. Sin embargo, OMS reporta que faltan datos detallados sobre su cobertura y alcance.
Lo cierto es que aún nos falta mucho trabajo en esta materia, que tanto nos cuesta en calidad de vida y sufrimiento, tanto para quienes se enfrentan a este mal, como para sus familias. Mucho podemos hacer aprendiendo los síntomas que podrían indicar peligro, realizar exámenes periódicos de detección y modificando las conductas de riesgo. ¡Es por ti y por quienes amas!
* Columna publicada originalmente en elpuntocritico.com [febrero 11, 2014]