• Turismo de naturaleza: una opción para México*

    En diciembre de 2014 el senador Luis Armando Melgar Bravo presentó una proposición con Punto de Acuerdo por el que el Senado de la República exhorta a la Secretaría de Turismo a instrumentar un programa que impulse el turismo de naturaleza y aventura. Suscribí esta propuesta junto con las senadoras Luz María Beristain Navarrete y Angélica Araujo Lara.

    La Comisión de Turismo dictaminó la propuesta en sentido positivo, pues acordó que se requieren nuevas oportunidades para México y las comunidades que cuenten con atractivos de naturaleza. Experiencias en otros países, así como en algunas localidades en México demuestran que este tipo de turismo tiene un gran potencial para ser autosustentable: utilizar, de forma responsable nuestros recursos naturales y desarrollar actividades que generarían bienestar económico, social y ambiental, tanto para las localidades que cuentan con esos recursos como para la economía nacional.

    México, clasificado entre las primeras cinco naciones con mayor biodiversidad, tiene todo para volverse una potencia en este espectro turístico.

    De acuerdo con la propia Secretaría de Turismo, el turismo de naturaleza se clasifica en: ecoturismo, turismo de aventura y turismo rural. El primero se refiere a actividades recreativas de apreciación y conocimiento de la naturaleza. El turismo de aventura son actividades recreativas, asociadas a desafíos impuestos por la naturaleza. Por último, los viajes de turismo rural se centran en actividades de convivencia e interacción con una comunidad rural, en todas aquellas expresiones sociales, culturales y productivas cotidianas de la misma. En México podemos desarrollar los tres tipos.

    Por ejemplo, en mi estado, Yucatán, se puede realizar una amplísima gama de actividades en contacto con la naturaleza; observar aves, nadar en los místicos cenotes mayas, atravesar manglares, hacer recorridos en bicicleta tipo montaña, pasear en Kayak y practicar pesca deportiva, entre otras actividades. Yucatán, en pocas palabras, es una aventura, y cuenta con cooperativas muy bien organizadas que brindan servicios diversos para disfrutar el regalo que la naturaleza.

    El turismo es vital para México, pues es un pilar fundamental para el desarrollo económico, tanto por su aportación al PIB como por la generación de millones de empleos.

    El Programa “Pueblos Mágicos”, que inició en 2001, ha impulsado el turismo en localidades poco visitadas y es fuente de goce para los turistas y de crecimiento y bienestar para sus habitantes. En este sentido, la aplicación de reglas similares a las del “Programa de Pueblos Mágicos”, con probado éxito, beneficiaría a muchas localidades que cuentan con atractivos de naturaleza y al sector turístico en general.

    Una partida del Presupuesto de Egresos de la Federación para esta opción de turismo traería desarrollo económico y social a muchas comunidades, así como la conservación sustentable de los recursos naturales. Ampliaríamos el número de turistas nacionales e internacionales, e. inyectaríamos nueva fuerza a las actividades del sector, pues los turistas de naturaleza y aventura tienen objetivos específicos, distintos a otros tipos de turismo.

    * Publicado originalmente en El Sol de México [marzo 30, 2015]

Deja una Comentario.

You must be logged in to post a comment.