“Población infantil yucateca puede quedar desprotegida”, por Daniel Ávila Ruiz
Daniel Ávila Ruiz
Yucatán, entidad que represento en el Senado de la República, vive una situación en la que casi la mitad de sus habitantes (957 mil personas) vive en condiciones de pobreza. Lo anterior, de acuerdo con las cifras del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval). Según la misma fuente, 10 por ciento de la población yucateca -esto es más de 223 mil personas-, viven en pobreza extrema.
Una de las manifestaciones más lacerantes de la pobreza es la desnutrición en niños menores de cinco años. Al respecto, datos de la última Encuesta Nacional de Salud y Nutrición (Ensanut 2012) arroja que dos de cada 10 niños yucatecos tienen anemia. En localidades rurales uno de cada cinco niños presenta desnutrición crónica.
Como parte de las alternativas en Yucatán para contribuir al desarrollo de la infancia y hacer frente a esta condición de desnutrición, existe el programa que implementa la organización Un Kilo de Ayuda, que tiene antecedentes de trabajo en localidades yucatecas desde hace ocho años.
En México dicha organización trabaja con sectores marginados desde hace 30 años. Como parte de su intervención acreditada, cuenta con 17 Centros para el Desarrollo Infantil Temprano (Cedit), en seis Estados de la República: Estado de México, Chiapas, Guerrero, Oaxaca, Sinaloa y Yucatán. En esas entidades apoya a más de 50 mil niños menores de cinco años en comunidades rurales e indígenas.
La intervención de Un Kilo de Ayuda no se circunscribe a labores de asistencia, pues a partir de su Programa de Desarrollo Comunitario en Yucatán, realiza diagnósticos familiares y comunitarios en sus tres centros: en Tekax ha acreditado 856, en Valladolid, mil 730 y en Xmatkuil dos mil 391.
Un Kilo de Ayuda tiene presencia en 181 localidades rurales de mi entidad, distribuidas en 88 municipios. Su objetivo ha sido llegar a 11 mil niños y niñas menores de cinco años para mejorar su nutrición, salud y desarrollo; especialmente se focaliza en niños con desnutrición crónica y con anemia.
Desafortunadamente, a pesar de las cifras y los buenos resultados, la organización Un Kilo de Ayuda ha informado que solo mantendrá su presencia en Valladolid, pues se ha visto obligada a suspender operaciones y cerrar los Centros para el Desarrollo Infantil Temprano de Tekax e Xmatkuil.
La explicación que ofrece la organización es que en el Presupuesto de Egresos del Estado 2017 no se previeron recursos para su programa y por tanto para la continuidad de sus actividades. Además, existe incertidumbre de la renovación del convenio que tenía la propia organización con la Secretaría de Desarrollo Social estatal.
Esta situación es lamentable porque sin esos recursos se dejará de intervenir en 68 municipios, por lo cual ocho mil niños yucatecos quedarán fuera de estos beneficios.
Es fundamental que encontremos alternativas para que esta organización siga apoyando las actividades a favor de nuestros niños yucatecos en situación vulnerable, pues como sociedad no podemos tirar por la borda mecanismos probados que nos den certidumbre del desarrollo óptimo de las nuevas generaciones.
*Publicado en El Sol de México [abril 11, 2017]
Foto: tribunacampeche.com